viernes, 19 de febrero de 2010

La Culpa la tiene el niño

Venezuela es un país cuyo principal producto, no es el petróleo. Venezuela es pura energía, esa es la verdadera y única ventaja comparativa del país. Antes que me tilden de loco, y digan que me parezco a Huguín, tengo que decirles lo siguiente, Venezuela es el único país de la tierra en el cual se puede exportar acero producido en hornos eléctricos, sí eléctricos, todos los demás usan carbón, petróleo, etc. Además, las arenas de bauxita, con las que se produce el aluminio, son una de las peores bauxitas del mundo, sin embargo, la eficiencia y la abundancia de electricidad, permite que esa bauxita se convierta en uno de los más competitivos aluminios y que se pueda exportar. Esto es tan cierto como que el sol alumbra los días. La electricidad permitía que se exportara otra cosa que no fuese petróleo. ¿Y entonces?
Los brasileros que son los imperialistas más peligrosos de la historia de la humanidad, después de Roma, lo saben y cuando se inauguró el Guri, comenzaron a negociar con los Venezolanos, porque ellos saben que esta tierra de gracia, está llena de pendejos vendepatrias que sueñan con vivir en Miami, y desde ahí hablan mal de Venezuela, que es donde hicieron la fortuna que se gastan allá, y todos y cada uno de los presidentes de los cuales denigramos (yo también lo hago) le dijeron que no. Aunque usted no lo crea. Ellos querían que le vendiéramos la electricidad “al costo” es decir, sin ganancia, por eso es que les dicen Joga bonito. Y en el año de 1999, se consiguieron a su hermano, quien no sólo les regala la electricidad, sin recorte, sino que pagó (por supuesto con sus reales y los míos) toda la acometida del cable que lleva la electricidad al norte del Brasil. Donde ellos desarrollan sus empresas y nosotros cerramos las nuestras, celdas, hornos están parados y cada vez producimos menos acero, hierro y aluminio. Bueno alguien tiene que sacrificarse por el imperio de los que ni siquiera se consideran latinoamericanos. Eso sí, todos en Venezuela gritan GOOOOL! Hasta cuando se lo hacen a la Vinotinto.
Ahora, por qué pasa esto, por qué racionan la electricidad, si este elemento es tan abundante y barato en Venezuela. Bueno, desde hace nueve meses hay cortes de luz en el interior de la República, sin Niño, sin sequía. Caracas, no le había ocurrido nada. Hasta que el gobierno tomó control de la EDC y desde hace un año está poniendo a funcionar a toda máquina la planta de Tacoa, que no se había puesto a funcionar desde el desastre, es decir desde los 80, sólo en caso de emergencias. Naturalmente, el gobierno que se reconoce socialista, no sabe planificar ni las veces que va al baño, y últimamente lo hace a cada rato. Hay turbinas apagadas en el Guri, hay generadores parados en Planta Centro y cada vez hay menos generación. Pregúntese como yo, ¿si muchas industrias están paradas, si la producción ha disminuido en las empresas industriales?, entonces el consumo no debe estar creciendo. Por lo que la demanda no debe haber crecido, es la producción eléctrica la que ha caído.
Eso sí, la culpa la tiene la tiene el niño que asola a Suramérica desde noviembre, (hace dos meses) aunque Bolívar, Táchira, Falcón, Anzoátegui, Sucre y otros estados han tenido cortes desde hace 9 meses. si desde este momento comienza a llover, no habrá excusa. Y todos sabrán como yo, que la culpa la tiene el niño. Si, el niño Hugo. Por si acaso, la excusa normalmente se acaba el primer trimestre de 2010.
Les sugiero a los grandes planificadores de este gobierno que realicen un nuevo plan de racionamiento, que sólo dejen gobernar a Huguín de 3 a 4 am. cada cinco días, y no dejen que los ministros se despierten a esa hora, de seguro que el país se arregla solo, y descubrimos que no nos hace falta gobierno, ni este, ni ninguno.
Sobre las medidas de la emergencia eléctrica. Le invitamos a revisar su consumo históricamente usted debe ser como la mayoría de los venezolanos, no debe consumir menos de 500 kW, y si es así, usted va a pagar el incremento, perdon el castigo por que alguien debe tener la culpa del desastre. Además del Niño.